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MADERA DE KIRI PARA CASAS PEQUEÑAS

El material más resistente para construir casas pequeñas es la madera. Es una materia prima renovable, es multiuso y fácil de trabajar en comparación con otros materiales y, además, garantiza gran comodidad y una temperatura interior saludable. Las casas de madera de construcción cúbica también se consideran muy elegantes.
Las casas pequeñas móviles no deben pesar más de 3,5 toneladas, lo que suele limitar la elección de los materiales de construcción clásicos. Por ello, aquellos que quieren una casa pequeña sobre ruedas apuestan por materiales de construcción ultraligeros que ofrecen más espacio habitable que otros en relación con su peso.

El bosque de kiri: el más ligero de entre los bosques.

La madera de kiri es especialmente adecuada para una casa pequeña. El kiri, también conocido como paulonia, es extremadamente ligero, muy estable, pirorretardante, resistente, sostenible y proporciona un aislamiento ideal. 

¿Esto qué significa? El peso tan bajo de la madera hace que la construcción, el equipamiento interior y el revestimiento de la fachada de la casa pequeña sean ultraligeros. Esto significa que se obtiene más espacio vital por cada kilo de material. Gracias a esto, se crean nuevas posibilidades de amueblamiento y se facilita su movilidad.
La madera también aporta propiedades perfectas para el día a día en la casa pequeña. El kiri puede tolerar grandes cantidades de vapor de agua, como las que se producen al cocinar o al ducharse en invierno: la madera reacciona con un comportamiento de contracción de hinchazón extremadamente ligero a los cambios de temperatura más fuertes y a las salpicaduras.

El material es también muy fácil de trabajar, es excepcionalmente duradero, no se agrieta ni se astilla. Y como el kiri aísla más del doble que el roble o el haya, sus paredes de madera ahorran material aislante adicional.

La producción del material para la construcción es sostenible en distintos aspectos: la madera de kiri sustituye a las especies de madera tropicales. El árbol de kiri vuelve a crecer tras la cosecha, acumula grandes cantidades de CO2 y protege los bosques naturales, porque se cultiva en tierras europeas con rutas de entrega mucho más cortas. Por ello, el kiri es el material perfecto para aquellos que se preocupan por el medio ambiente y por el estilo de su propia casa pequeña sin tener que renunciar a la comodidad.

7 razones para tener una casa pequeña de madera de kiri.


Peso.

Con un peso de unos 270 kg/m³, la madera de kiri es una de las especies de madera más ligeras del mundo. Como comparación: el roble pesa unos 770 kg/m³, el haya 720, el pino 480 y el abeto 450 kg/m³.


Resistencia y estabilidad.

La madera de kiri tiene una estructura celular en forma de panal, lo que hace que la madera sea muy fuerte y estable en relación con su peso. En un entorno con fuertes cambios de temperatura, el kiri convence por su bajo comportamiento de hinchamiento y contracción.


Aislamiento.

Con sólo 0,09 W/mK, la madera de kiri aísla más del doble que la madera de roble o de haya. En comparación con el abeto que se suele utilizar en la construcción de las casas pequeñas, el kiri destaca por un coeficiente de transferencia de calor un 30 % menor.


Aspecto.

La veta beige claro discreta, homogénea y estética le confiere a la madera de kiri un aspecto inconfundible y de alta calidad, un punto de atracción excepcional tanto en el diseño de interiores como en el de fachadas.


Durabilidad.

No se agrieta, no se ahueca y no se deforma. El kiri tiene una naturaleza muy duradera, por lo que es ideal para el revestimiento de fachadas. Al mismo tiempo, es fácil de procesar, no se astilla y absorbe fácilmente los esmaltes y las lacas.


Inflamabilidad.

En Japón, los armarios de kimono ignífugos se fabrican con madera de kiri por una buena razón. El kiri empieza a arder cuando alcanza temperaturas de más de 400 °C (el pino: 225 °C, el roble 260 °C).


Sostenibilidad.

Nuestra madera de kiri procede de zonas de cultivo gestionadas de forma sostenible en Europa. La madera de kiri preserva nuestros bosques de manera natural, sustituye a las especies tropicales, no tiene rutas de transporte eternas y su árbol vuelve a crecer tras la cosecha.


UN MATERIAL PARA LOS MÁS ECOLOGISTAS.

Cada casa pequeña es única. Sostenible, móvil y única.

Tener una casa propia: para muchas personas este es el motivo por el que trabajan durante décadas. Sin embargo, no hace falta que se pase media vida sentado o sentada entre cuatro paredes. Una casa pequeña (tiny house) es poco más grande que una autocaravana, es fácil de construir y mucho más barata que una casa unifamiliar clásica. Ofrece comodidad y estilo en unos pocos metros cuadrados de espacio y también puede ayudar a reducir la huella de carbono. En especial si confía en los materiales de construcción de fuentes sostenibles.

¿Qué es una casa pequeña?

El concepto de casa pequeña viene del inglés tiny house, y se denomina así a una categoría propia de arquitectura. El concepto se creó hace relativamente poco a causa del aumento de los alquileres y del precio del suelo. Este tipo de casa pequeña compacta suele tener entre 15 y 45 metros cuadrados de superficie habitable, lo que se corresponde con una planta de un piso de uno o dos dormitorios.

Como una Tiny House es tan pequeña, ocupa relativamente poco espacio en el suelo y puede ser trasladada si es necesario. Por ejemplo, se puede instalar como ático en la azotea de otro edificio. O en un campamento. Sin embargo, una casa pequeña también está sujeta a las normas de construcción del estado, y es necesario disponer de un permiso de construcción para construirla.

Una casa pequeña puede utilizarse de muchas maneras: como casa de jardín, como oficina independiente, como parte de una casa modular o como una casa normal para vivir. Quien se construye una casa pequeña, tiene el poder de elegir con qué materiales va a hacerla y qué estilo quiere seguir.

¿Por qué elegir una casa pequeña?

Aquellos que aún no hayan comprado una propiedad o que deseen tener una pequeña casa para sus vacaciones, pueden encontrar la solución en una Tiny House sobre ruedas. Con una casa pequeña, el deseo de llevar una vida mucho más sostenible también puede hacerse realidad: La fabricación de una casa tan pequeña ahorra recursos, tanto si se trata de una casa prefabricada como si decide coger un martillo y una sierra y ponerse a construirla. El espacio habitable reducido también ayuda a llevar un consumo responsable y a limitarse a lo que es estrictamente necesario.

Puede encontrar más información útil sobre las casas pequeñas en la página web de la Tiny House Association.

Imágenes: Bosswerk / Nettetal